jueves, 25 de febrero de 2016


                                          


Trabajar en equipo implica compromiso, no es sólo la estrategia y el procedimiento que la empresa lleva a cabo para alcanzar objetivos comunes. Es necesario que exista liderazgo, armonía, responsabilidad, creatividad, voluntad, organización y cooperación entre cada uno de los miembros. Este grupo debe estar supervisado por un líder, el cual debe coordinar las tareas y hacer que sus integrantes cumplan con ciertas reglas.
La gran complejidad del mundo laboral y la innovación generan diferentes situaciones que requieren diversidad de habilidades, altos niveles de conocimiento, respuestas rápidas y adaptabilidad. El trabajo en equipo es considerado un punto clave y una ventaja competitiva. La competencia participativa permite aumentar la productividad, la innovación y la satisfacción en el trabajo.

Para llevar a cabo las diferentes tareas, se precisa de la colaboración y cooperación de varios miembros, estimulando de este modo la participación y la comunicación entre ellos y generando una mejora y un incremento de la calidad. Los equipos empiezan a ser la principal forma de trabajo, considerada como una unidad, que puede generar más beneficios a las organizaciones que un simple trabajador.

Esta nueva manera de trabajar ha ido aumentando notoriamente desde los años 80 hasta ahora, pero se ha impuesto con mucha fuerza sobre todo desde los años noventa.
Los equipos se han considerado como entidades complejas, dinámicas y adaptables, integradas en un sistema de multinivel. Los equipos no surgen de manera natural, sino que es una manera de trabajar, un sistema.

Trabajar en equipo, requiere la movilización de recursos propios y externos, de ciertos conocimientos, habilidades y aptitudes, que permiten a un individuo adaptarse y alcanzar junto a otros en una situación y en un contexto determinado un cometido.

El funcionamiento del sistema, requiere la competencia de todos y cada uno de sus componentes para el desarrollo de los procesos e interacción dirigidos a la producción conjunta de un resultado.

Ponen en evidencia el carácter multidimensional de la competencia, como una combinación de saberes, técnicas, actitudes, dispositivos y comportamientos orientados hacia la  actividad profesional. Hay 4 clases de competencias: técnicas (el saber), metodológicas (el saber hacer), personales (saber ser), y sociales (saber participar).

La competencia de trabajo en equipo incluye el conocimiento, principios y conceptos de las tareas y del funcionamiento de un equipo eficaz, el conjunto de habilidades y comportamientos necesarios para realizar las tareas eficazmente, sin olvidar las actitudes apropiadas o pertinentes por parte de cada miembro del equipo que promueven el funcionamiento del equipo eficaz.
En el equipo de trabajo debe analizar el sistema de conocimientos, habilidades y capacidades, las situaciones del trabajo en equipo y centrarse en el individuo.

Presentan un modelo de trabajo en equipo que parte de unas premisas preconcebidas: determina que la competencia de planificación, toma de decisiones en grupo, adaptabilidad, flexibilidad y las habilidades en las relaciones interpersonales configuran el núcleo del trabajo en equipo, la comunicación, esta se integra en cada una de las competencias, aporta la cultura como otro factor a tener en cuenta.

Hay siete dimensiones de la competencia de trabajo en equipo: la planificación del equipo, la coordinación-cooperación, la comunicación, el procedimiento de seguimiento y feedback, la Resolución de conflictos, la Resolución de problemas colaborativos y ajustamientos del equipo donde se trabajan los aspectos de apoyo, orientación dentro del equipo e innovación.

Los autores dividen la competencia en actitudes, comportamientos y cognición, denominando el modelo ABCs.

La estructura de categorización que se propone establece cuatro categorías, que culminaran con una definición clara y analítica de la competencia: Dimensión, componentes, elemento e indicador.

En conclusión el trabajar en equipo es fortalecer las habilidades, destrezas y competencias que tiene un individuo, que le permite desempeñar de la mejor manera en el campo profesional que trabaja con dinamismo y autoestima.

El trabajo en equipo es un método de trabajo colectivo “coordinado” en el que los participantes intercambian sus experiencias, respetan sus roles y funciones, para lograr objetivos comunes al realizar una tarea conjunta.

Así es lo que se debemos trabajar en todas las instituciones educativas procurando remar a la misma dirección para poder conseguir los objetivos que hemos planteado entre todos los miembros de la unidad.